No solo de pan vive el hombre, también...se bebe, y hoy os presento una bebida para tomar tras un largo día antes de irse a la cama, para relajarse e irse con la conciencia tranquila de un día bien hecho y aprovechado, os presento al:
Té endulzado con miel con miriadas de estrellas de vainilla sobre dulce lecho de lágrimas de chocolate con ligera y suave insinuación de menta.
Conceptualmente como nombre, no me digáis que nos parece un plato de esos que te cobran 100€ y solo te ponen el tenedor con una punta! porque total, para pinchar el minúsculo trocito que te ponen, jejejejeje
Os explico cómo se hace, calentamos agua hasta hervir y la añadimos en una taza donde previamente hemos depositado una fina capa de miel. Introducimos la bolsita de té y la agitamos. Cogemos un trozo de chocolate, como la mitad de una onza o así, y con mucho cuidado...vamos rozando la superficie del agua hirviendo de forma que se vayan originando las lágrimas. Cogemos un bote de yogurt líquido, en mi caso vainilla, pero puede ser del qué queráis, y directamente del frigo (aún frío) añadimos dos gotas en el té, formándose las miriadas de estrellas. Y finalmente si os gusta podéis pasar por el té unos trocitos de una hoja de menta (no demasiado), y listo!!! a beberlo y disfrutarlo a ser posible en la mejor de las compañías.
